Ejercicio sobre la nostalgia. La arquitectura de Emilio Armstrong

No hay momento mas odioso que el primer minuto de una charla de un arquitecto. Instante cargado de falsa molestia y deseos de gritar !ADVIERTAN MI TRABAJO!!MIREN LO INTERESANTE QUE SOY! pese a ello y que en contadas ocasiones se vislumbran dosis de lucidez y/o interesante matices entorno a la disciplina.

"Para conocer mi trabajo , primero debo presentar quien soy" La premisa es bastante presuntuosa. Pero a la vez honesta. Resulta bastante inspirador dirigir la mirada a la vida propia, hacia las mil experiencias, volver a sentir esos aromas sabores, volver a degustarlos una y otra vez.

Mi trabajo es a mi vida, es un ejercicio sobre la nostalgia, que roza el romanticismo. En el libro "Pensar la Arquitectura" Zumthor declara su fascinación por los acontecimientos de su niñez; de aquellos aromas y visiones de su madre en una cocina a la luz de una cálida tarde...recuerdos que son parte, segun su relato, intrínseca de su arquitectura, aquella que desarrolla hasta el día de hoy.

Y como algo sabemos de Zumthor, bien le corresponde este modo de arquitectura, de simpleza y dotada de una sensibilidad envidiablemente exquisita.

Los sentidos almacenan los recuerdos, a medida que nos estimulamos estos afloran y nosotros embebidos en ese instante, lo hacemos presente, lo evocamos, e invocamos. El espiritu de los recuerdos habita en los sentidos y el espíritu de la arquitectura habita en ellos.

Eduardo Castillo con mucha precisión, indaga su arquitectura en la búsqueda de una memoria material, de elementos presentes no tan solo en los recuerdos sino en el complejo escenario de nuestras vidas; aquellos mas olvidados e inútiles ,olvidos, parcialidades, elementos inacabados...ruinas, artefactos, una suma de indicios invocados para alguna labor mas o menos del mismo orden; pasar a ser indicio mas pero ahora en cuerpo nuevo, en el cuerpo de la arquitectura.

No es un ejercicio simple...pero digamos que todos lo hacemos...reconstruimos/reflejamos nuestra memoria en nuestra arquitectura (de cada uno) como diciendo este soy, y asi quiero ser recordado.

cc